La Agencia para la Reincorporación y Normalización, ARN, rechazó el asesinato de Florilba Ramos Morano y Ferney Elago Caviche, firmantes del Acuerdo de Paz acribillados mientras se encontraban en su casa en zona rural de Silvia, Cauca.
De acuerdo con la ARN, ambos adelantaban su proceso de reincorporación como supervisores del proyecto de aguacate hass de la Cooperativa Multiactiva Ecomún Esperanza del Pueblo, Coomep.
“Una iniciativa ejemplo de sostenibilidad y transformación económica y social en el territorio”, indicó la entidad en un comunicado a la opinión pública en Cauca.
Al lamentar el hecho, Luis Alejandro Delgado, coordinador del Grupo Territorial Cauca de la ARN, dijo que estas dos personas eran indígenas nasas que trabajaban, además, en una iniciativa de cultivo de tilapia con lo que dinamizaban su economía propia y la del entorno en el que residían.
“Nos solidarizamos con sus familias. Con la hija de Florilba y con el proceso organizativo y colectivo de firmantes de paz del Cauca. Rechazamos que la violencia y la guerra sea la salida que tenga el Cauca en estos momentos”, anotó el funcionario, al solicitar a los grupos armados ilegales “cesar la violencia contra la población civil y especialmente los firmantes de paz”.
Esta agencia agregó que estos crímenes restan posibilidades reales de paz y debilitan los esfuerzos de reconciliación.
Por su parte, Leonardo González, director del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, explicó que el crimen ocurrió cuando “sujetos armados llegaron a su vivienda y los asesinaron en un contexto de creciente presencia y disputa entre grupos armados ilegales”.
Y es que la Defensoría del Pueblo, mediante la Alerta Temprana 024 de 2023, ya había advertido sobre el riesgo extremo en el municipio de Silvia, señalando amenazas a la vida, homicidios, hostigamientos, restricciones a la movilidad y confinamientos forzados.
“En la zona operan el Frente Dagoberto Ramos del Bloque Occidental del Emc, el Eln y bandas de carácter local, lo que ha intensificado el peligro para excombatientes en proceso de reincorporación y para la población civil”, se aseveró desde Indepaz.
En lo corrido del año, ya son 5 los firmantes asesinados en Cauca (de los 28 a nivel nacional) y 85 en este departamento desde la firma del acuerdo, de un total de 466 firmantes asesinados en todo el país desde 2016.
“Esta situación refleja una grave crisis de seguridad y falta de garantías para quienes le apostaron a la paz, en especial en territorios disputados por actores armados. Se requieren medidas urgentes de protección colectiva, implementación integral del Acuerdo y presencia estatal efectiva con enfoque territorial y de derechos humanos”, recalcó Leonardo González, directo de Indepaz.