El obispo de la Diócesis de Granada (Meta), monseñor José Figueroa Gómez, manifestó su alegría por la elección del papa León XIV: “Estamos rebosantes de alegría. Él es un Papa muy cercano, con raíces latinoamericanas. Dios nuestro Señor nos ha dado un buen Papa, lo cual nos anima a seguir construyendo nuestra Iglesia. Las señales de sencillez, servicio y humildad que mostró en su primera aparición nos inspiran. Esta Iglesia seguirá en la senda que ya venía iluminándose: una Iglesia servidora de la humanidad, con un fuerte compromiso por la paz y bajo el auxilio de la santa Madre María”.
Monseñor Figueroa también hizo un llamado a orar por la Iglesia y por el nuevo pontífice.
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Ángel Correa, feligrés del municipio de Mesetas, también se pronunció: “Como católico, veo con buenos ojos esta elección. Es un Papa abierto al diálogo, pero con el firme propósito de fortalecer la unidad de la Iglesia y trabajar por toda la humanidad”.
Por su parte, Flor García, creyente del sur del Meta, destacó el aspecto espiritual de la elección: “Es muy significativo, porque creemos que ha sido por voluntad de Dios, a través del Espíritu Santo y con la ayuda de las oraciones de todos. Se nota que es un hombre maduro en la fe y muy humano”.
El padre Carlos Cifuentes, sacerdote en El Castillo (Meta), agregó: “Esta elección debe entenderse como una iniciativa de Dios, inspirada por el Espíritu Santo y llevada a cabo por los cardenales. Es un hombre de fe, con una doctrina firme. Como Vicario de Cristo en la Tierra, sabrá guiar a la Iglesia. Debemos orar mucho por él, así como él ora por todos nosotros”.
Con esperanza y compromiso, la comunidad católica del sur del Meta se prepara para caminar al ritmo del nuevo pontífice.